Uno de los principales problemas que padecen las personas con acné, es conseguir eliminar las cicatrices que aparecen durante el proceso de curación en esta enfermedad dermatológica.
Estas cicatrices son parte del proceso de curación del acné, pero si la piel produce pico colágeno quedará una lesión cóncava. En el caso contrario, en que la piel produzca excesivo colágeno quedará una cicatriz elevada.
Estas cicatrices del acné pueden hacerte sentir tan cohibido como el propio acné, así que, ¿qué puedes hacer al respecto?
Aunque existen soluciones como la cirugía y el rejuvenecimiento con láser, también puedes encontrar alivio a través de estas opciones de tratamiento naturales menos invasivas.
También conocido como Nigella sativa, el aceite de semilla negra es originario de Europa del Este, Asia occidental y Medio Oriente. Es una planta medicinal relativamente común.
Además de tener propiedades antibacterianas y antivirales, el aceite es antiinflamatorio. Pero reducir la inflamación no es la única forma en que puede ayudar a reducir las cicatrices. Los estudios han demostrado que puede acelerar y mejorar la cicatrización de heridas. También puede igualar la pigmentación o incluso prevenir el acné por completo.
Comercializado principalmente como una solución para el envejecimiento, el aceite de semilla de rosa mosqueta está ampliamente disponible y es seguro para aplicar directamente sobre la piel.
Un estudio también ha indicado que puede usarse para tratar cicatrices.
Aunque el estudio fue específico para las cicatrices quirúrgicas, el aceite podría ser igualmente útil para reducir las cicatrices del acné. Los investigadores encontraron que su aplicación dos veces al día reducía la apariencia de cicatrices y decoloración.
La miel se utiliza con numerosos fines medicinales, como quemaduras, heridas y herpes.
También la aplicación directa de miel puede ayudar a aclarar y limpiar heridas debido a sus propiedades antibacterianas. Así mismo, es capaz de combatir infecciones que de otro modo podrían provocar la aparición de más acné.
Como la miel, el aloe vera es un remedio casero común. En el caso del acné, funciona de manera similar para ayudar al proceso de curación.
Según un estudio en Anales de Cirugía Plástica, la aplicación de aloe vera directamente sobre las heridas reduce la inflamación y el tamaño del tejido cicatricial.
No existe ninguna investigación significativa que demuestre que el jugo de limón sea eficaz para eliminar las cicatrices del acné. Sin embargo, la evidencia popular es amplia.
Muchos dicen que han tenido un gran éxito al aplicar jugo de limón a las cicatrices del acné. Los defensores dicen que ayuda a reducir la decoloración e igualar el tono de la piel.
Debido a que el jugo de limón es muy ácido, aplica solo unas gotas directamente sobre las cicatrices.
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