Los tratamientos naturales o complementarios para las enfermedades cardíacas suelen tener como objetivo controlar los niveles de colesterol, reducir la presión arterial y mejorar la salud del corazón.
Normalmente, la investigación sobre dichos tratamientos es limitada, en comparación con la de los tratamientos médicos convencionales.
Pocos productos naturales se han investigado lo suficiente para demostrar que pueden reducir el colesterol clínicamente.
Sin embargo, muchas personas han tenido cierto éxito con tratamientos alternativos, y algunos suplementos para reducir el colesterol y remedios naturales podrían resultar útiles.
Antes de probar tratamientos alternativos, consulta con un profesional de la salud para determinar si son seguros para ti. Los ingredientes de algunas terapias alternativas pueden interferir con ciertos medicamentos o tener efectos secundarios dañinos.
1. Astrágalo
El astrágalo es una hierba que se usa para reforzar el sistema inmunológico en la medicina tradicional china.
Tiene propiedades antibacterianas y antiinflamatorias. Se considera un "adaptógeno", ya que se cree que protege al cuerpo contra diversas tensiones.
Los estudios limitados sugieren que el astrágalo puede tener algunos beneficios para el corazón, aunque se necesita más investigación para saber cómo el astrágalo puede afectar sus niveles de colesterol y la salud general del corazón.
2. Espino
El espino es un arbusto relacionado con la rosa. Sus bayas, hojas y flores se han utilizado para problemas cardíacos desde el Imperio Romano.
Algunos estudios han encontrado que la planta es un tratamiento eficaz para formas más leves de insuficiencia cardíaca, pero desgraciadamente no hay suficiente evidencia científica para saber si el espino es efectivo para otros problemas cardíacos.
Además, el espino puede tener interacciones negativas con muchos medicamentos recetados y otras hierbas.
3. Semilla de lino
La semilla de lino proviene de la planta de lino. Tanto la semilla de lino como el aceite de linaza contienen altos niveles de ácido alfa-linolénico (ALA). Este es un ácido graso omega-3 que puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedad cardíaca.
La investigación sobre los beneficios de la linaza para la salud del corazón ha producido resultados mixtos. Algunos estudios sugieren que las preparaciones de linaza pueden ayudar a reducir el colesterol, particularmente entre personas con niveles altos de colesterol y mujeres posmenopáusicas.
4. Suplementos de aceite de pescado con ácidos grasos omega-3
Los ácidos grasos omega-3 también se encuentran en el pescado y los aceites de pescado. El salmón, el atún, la trucha de lago, el arenque, las sardinas y otros pescados grasos son fuentes especialmente ricas.
Los expertos han creído durante mucho tiempo que los ácidos grasos omega-3 en el pescado ayudan a reducir el riesgo de contraer enfermedades cardíacas. Otros nutrientes del pescado, o una combinación de esos nutrientes y ácidos grasos omega-3, pueden ayudar a proteger tu corazón.
Comer una o dos raciones de pescado graso a la semana puede reducir tus probabilidades de sufrir un ataque cardíaco.
Si tienes una enfermedad cardíaca, también puede beneficiarse tomando suplementos de ácidos grasos omega-3 o comiendo otros alimentos ricos en ácidos grasos omega-3. Por ejemplo, las nueces, el aceite de canola y la soja son buenas fuentes.
La evidencia es más sólida sobre los beneficios de comer pescado con ácidos grasos omega-3 que tomar suplementos o comer otros alimentos.
5. Arroz de levadura roja
El arroz de levadura roja es un ingrediente de cocina y de la medicina tradicional china. Se elabora cultivando arroz rojo con levadura.
Algunos productos de arroz de levadura roja contienen cantidades sustanciales de monacolina K. Esta sustancia es químicamente idéntica al ingrediente activo del medicamento lovastatina para reducir el colesterol. Los productos de arroz de levadura roja que contienen esta sustancia pueden ayudar a bajar tus niveles de colesterol en sangre.
Otros productos de arroz de levadura roja contienen poca o ninguna monacolina K. Algunos también contienen un contaminante llamado citrinina. Este contaminante puede causar insuficiencia renal.
En muchos casos, no hay forma de saber qué productos contienen monacolina K o citrinina. Por lo tanto, es difícil saber qué productos serán efectivos o seguros.
6. Suplementos de esterol y estanol vegetal
Los esteroles y estanoles vegetales son sustancias que se encuentran en muchas frutas, verduras, nueces, semillas, granos y otras plantas. Algunos alimentos procesados también están fortificados con esteroles o estanoles vegetales, como la margarina fortificada, el jugo de naranja o los productos de yogur.
Los esteroles y estanoles vegetales pueden ayudar a reducir el riesgo de enfermedad cardíaca. Ayudan a evitar que el intestino delgado absorba el colesterol. Esto puede reducir los niveles de colesterol LDL (malo) en sangre.
7. Ajo
El ajo es un bulbo comestible que se ha utilizado como ingrediente de cocina y medicina durante miles de años. Se puede comer crudo o cocido. También está disponible en forma de suplemento, como cápsula o tableta.
Algunas investigaciones sugieren que el ajo puede ayudar a reducir la presión arterial, reducir los niveles de colesterol en sangre y retrasar el progreso de la aterosclerosis.
Sin embargo, como sucede con muchas terapias alternativas, los estudios han arrojado resultados mixtos. Por ejemplo, algunos estudios han encontrado que tomar ajo durante 1 a 3 meses ayuda a reducir los niveles de colesterol en sangre.
Ventajas de los remedios naturales
Se puede acceder a la mayoría de los remedios naturales sin receta.
Algunas personas encuentran útiles los remedios naturales cuando se utilizan con su plan de tratamiento estándar.
Contras de los remedios naturales
No hay evidencia de que los remedios alternativos o herbales por sí solos puedan reducir el colesterol.
La mayoría de los remedios naturales no están regulados, lo que significa que es posible que se desconozcan algunos efectos secundarios.
Cambios en la dieta y el estilo de vida
También puedes adoptar hábitos de vida saludables para ayudar a controlar tus niveles de colesterol en sangre. Por ejemplo:
Si fumas, considera dejar de hacerlo.
Mantén un peso saludable para tu cuerpo.
Trata de hacer ejercicio la mayoría de los días de la semana.
Incluye más alimentos saludables para el corazón y alimentos ricos en fibra soluble y ácidos grasos omega-3.
Limita tu consumo de alimentos con alto contenido de grasas saturadas. Por ejemplo, sustituye la mantequilla por aceite de oliva.
Intenta eliminar las grasas trans de tu dieta.
Si bebes, asegúrate de que sea con moderación.
Toma medidas para reducir el estrés.
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