En medio de la pandemia de COVID-19, la comunidad médica ha logrado avances muy importantes a lo largo de 2020. Aquí te explicamos 5 de las innovaciones más impactantes del año.
A partir de los avances en oncología, terapias génicas y salud cardíaca, la comunidad médica realizó muchos avances nuevos en 2020. Todo ello con una pandemia mundial mortal que reorientó la forma en que vivimos y nos relacionamos con los demás.
La pandemia de COVID-19 ha dominado con razón los titulares y la atención de los medios, los responsables políticos y los funcionarios de salud por igual.
Si bien es claramente el evento del año que define la salud pública, la cultura, la economía e incluso la política, la pandemia no debería ocultar el hecho de que 2020 también fue una época de gran innovación médica.
Hay muchas cosas de las que la comunidad médica puede estar orgullosa en 2020.
1. El año del código genético.
Casi todos los expertos están de acuerdo en que la edición genética fue una de las grandes historias del año.
En octubre, Emmanuelle Charpentier y Jennifer A. Doudna recibieron el Premio Nobel de Química por descubrir las tijeras genéticas CRISPR / Cas9. (Solo otras cinco mujeres han ganado este premio antes).
Esta herramienta de "tijera" genética es lo que parece: las enzimas cortan fragmentos de ADN para restaurarlos a su función normal.
Charpentier y Doudna demostraron que estas herramientas genéticas pueden controlarse para cortar cualquier tipo de molécula de ADN en un lugar designado, no solo para distinguir el ADN de los virus, ya que estas tijeras existen en su forma natural.
Básicamente, significa que podemos reescribir el código de la vida. Además esta innovación tiene ramificaciones de amplio alcance para las personas que tienen una amplia gama de condiciones genéticas, como la enfermedad de células falciformes, una afección en la que los glóbulos rojos con forma de hoz malformados causan bloqueos en el flujo sanguíneo, lo que evita que la proteína hemoglobina transporte de manera efectiva el oxígeno necesario a través del cuerpo.
Ahora, con este avance se puede eliminar el error y reemplazar el código genético, como en tu computadora o tu iPhone si descargaste un parche para un nuevo software para reparar una aplicación que siempre falla.
2. Avances en la investigación de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares
Un nuevo estudio de fase 3 podría cambiar la forma en que se trata la miocardiopatía hipertrófica (cuando el músculo cardíaco se engrosa y puede endurecerse).
También son destacables los nuevos tratamientos que podrían cambiar la terapia de primera línea para la fibrilación auricular (AFib): una nueva cirugía mínimamente invasiva para prevenir un accidente cerebrovascular y un nuevo ensayo que revela que más tratamiento no necesariamente significa un mejor tratamiento para la enfermedad coronaria.
Todos estos avances durante el año pasado reflejan conexiones entre áreas aparentemente dispares de la medicina y el hecho de que tenemos más éxito para derribar las barreras entre los campos.
Para abordar un problema tan amplio como la enfermedad cardíaca, por ejemplo, se requiere un enfoque integral e interdisciplinario.
Por ejemplo, aprendimos más este año sobre las formas inesperadas en las que los medicamentos diseñados para tratar la diabetes, los inhibidores del transportador de glucosa de sodio 2 o los inhibidores de SGLT2 ayudan a los pacientes con insuficiencia cardíaca, incluso a los que no tienen diabetes.
También es destacable nuestra creciente comprensión de cómo las conexiones entre enfermedades infecciosas como la gripe y COVID-19 están vinculadas a un mayor riesgo de enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular.
3. Avances en oncología: técnicas preventivas para terapias dirigidas
El 2020 ha sido un año en el que la investigación del cáncer avanzó en múltiples frentes.
Se están desarrollando tecnologías para la detección temprana del cáncer mediante análisis de sangre.
Se sabe desde hace bastante tiempo que los tumores liberan ADN en el torrente sanguíneo, tenemos tecnología en desarrollo desde el punto de vista de monitorear tumores, realizar pruebas sensibles para tumores, pruebas para la recurrencia de cánceres y pruebas basadas en proteínas.
También la tecnología que modula los patrones de secuencia de ADN reguladores, que se refiere a la parte de la molécula de ADN que puede cambiar la forma en que un gen se expresa en un ser vivo, para señalar cuándo los patrones de metilación podrían apuntar al desarrollo de cáncer.
Entre otros aspectos destacados de la investigación durante el año pasado, los investigadores han estado desarrollando nuevas formas de "drogar" las mutaciones genéticas.
Se está trabajando en el desarrollo de un compuesto para degradar el receptor de andrógenos de las células cancerosas de próstata, lo que permite que estas células cancerosas crezcan.
4. Un análisis de sangre para la enfermedad de Alzheimer
Este año, un posible avance en la investigación y el tratamiento de la enfermedad de Alzheimer se produjo en forma de un análisis de sangre que puede diagnosticar esta forma progresiva de demencia.
Si bien la noticia es enorme, la prueba aún se encuentra en la fase de prueba.
Si finalmente se aprueba, una simple prueba para la afección cambiaría las reglas del juego.
El número de personas que viven con Alzheimer probablemente se triplicará para el 2060.
Si bien esta prueba aún no ha pasado por todas las aprobaciones adecuadas, una empresa distribuyó la primera prueba de sangre para la enfermedad de Alzheimer disponible públicamente este otoño.
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