La mayoría de las causas del dolor repentino de dientes son fácilmente tratables por tu dentista, por lo que debes programar una cita de inmediato. Mientras tanto, hay algunos remedios que puedes intentar para encontrar un alivio temporal del dolor.
Los remedios caseros que te pueden ayudar con el dolor de muelas hasta que puedas visitar a un dentista, son:
Aceite de clavo
El aceite de clavo es un remedio casero popular para los dolores de muelas. De hecho, el clavo se ha utilizado durante siglos para el dolor de dientes ya que contiene un ingrediente activo llamado eugenol, que adormece la piel que toca. Es posible que encuentres aceite de clavo en la sección de medicamentos de su supermercado.
Exprime unas gotas de aceite de clavo en 1 cucharadita de aceite de oliva (u otro aceite portador) en un plato pequeño. Luego, sumerge un hisopo de algodón en la mezcla. Coloca la bola de algodón empapada sobre el diente dolorido y déjala reposar durante 5 a 10 minutos.
El aceite de clavo se considera seguro en general, pero no se recomienda su uso en niños.
Enjuague con agua salada
Intenta hacer gárgaras con un enjuague de agua salada para ayudar con el dolor de dientes.
La sal es un antiséptico que también puede reducir la inflamación. Enjuagarse la boca con agua salada promueve la salud de las encías y mejora la curación de llagas o úlceras.
Para hacer un enjuague con agua salada, mezcla 1 cucharadita de sal con un vaso de agua tibia. Agita la solución en tu boca durante unos 30 segundos, luego escúpela.
Enjuague con peróxido de hidrógeno
Para un alivio temporal, puedes enjuagarte la boca con peróxido de hidrógeno diluido en agua.
Comienza con una concentración del 3% de peróxido de hidrógeno. Mezcla 1 parte de peróxido de hidrógeno con 2 partes de agua.
Después de hacer buches en la boca durante unos 60 segundos, escupe la solución. No te la tragues. Luego, enjuaga con agua.
Un enjuague con peróxido de hidrógeno puede ayudar a reducir la inflamación de las encías.
Ajo
El ajo contiene un compuesto llamado alicina, que tiene propiedades antibacterianas y antimicrobianas. Ayuda a matar algunas de las bacterias asociadas con los dolores de muelas.
La alicina se crea cuando los dientes de ajo se trituran, mastican o pican. El compuesto solo está presente durante una pequeña cantidad de tiempo, por lo que necesitarás dientes de ajo frescos para este remedio.
Puedes masticar suavemente un diente de ajo pelado para liberar la alicina o triturar el ajo con un mortero o el dorso de una cuchara y aplicarlo directamente sobre el diente afectado con un hisopo de algodón o con los dedos.
Té de menta
El té de menta puede ayudar a adormecer el área dolorida de la boca. También tiene propiedades antimicrobianas, por lo que puede luchar contra las bacterias bucales que conducen a la caries dental.
Primero, prepara una taza de té hirviendo agua y añadiendo una cucharadita de hojas secas de menta o una bolsita de té de menta. Retira la bolsita de té o cuela las hojas y déjala enfriar.
Enjuaga tu boca con el té enfriado. Puedes repetir según sea necesario para obtener alivio.
Aloe vera
El aloe vera es una planta que tiene propiedades antiinflamatorias y antibacterianas, por lo que te puede ayudar a aliviar parte de la inflamación relacionada con la enfermedad de las encías u otra irritación en la boca.
El gel de aloe vera también puede mejorar los síntomas de la periodontitis, una enfermedad grave de las encías que destruye el hueso que sostiene los dientes.
El enjuague bucal de aloe vera es tan eficaz para reducir la enfermedad periodontal como la clorhexidina, un enjuague bucal germicida de uso común.
Haz buches en la boca durante 30 segundos aproximadamente, dos veces al día, y escupe.
Eleva tu cabeza
Intenta dormir con la cabeza elevada sobre una almohada o varias almohadas. Esto evitará la presión causada por el flujo de sangre hacia la cabeza y la boca y puede reducir la hinchazón.
Bolsa de hielo
El hielo puede ser útil para la hinchazón facial o una lesión en la boca. El hielo contrae los vasos sanguíneos, lo que puede reducir el dolor. Puedes aplicar una bolsa de hielo o cubitos de hielo envueltos en una toalla en la mandíbula o la cara en intervalos de 15 minutos. No comas ni mastiques los cubitos de hielo. El hielo duro puede dañar aún más tus dientes.
Qué no debes hacer
Trata de evitar las siguientes actividades, ya que pueden empeorar el dolor de muelas.
No fumes, ya que puede provocar caries y, en general, es perjudicial para la salud de sus dientes.
No te cepilles ni uses hilo dental con demasiada fuerza. Esto puede desgastar el esmalte dañando tus dientes y encías.
No comas alimentos crujientes o pegajosos, que pueden dañar aún más tus dientes.
Evita las bebidas y los alimentos excesivamente fríos o calientes, ya que los dientes pueden estar más sensibles, especialmente si hay nervios expuestos.
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