Desde que las autoridades sanitarias estadounidenses autorizaran la comercialización de la vacuna Pfizer-BioNTech COVID-19, en personas de 16 años o más, se han recopilado datos de seguridad de 37.586 participantes inscritos en un ensayo clínico de fase 3 en curso.
Los datos disponibles sugieren que después de dos dosis, la vacuna tiene una efectividad del 95% para prevenir COVID-19. Hasta ahora y basado en la gran cantidad de personas que han sido monitoreadas de cerca durante el estudio, el perfil de seguridad del paciente es excelente en términos de efectos secundarios.
La vacuna Pfizer-BioNTech COVID-19 se administra en dos dosis, con 3 semanas de diferencia y como comentábamos, hasta la fecha se han recopilado datos de seguridad sobre la vacuna de 37.586 participantes inscritos en un ensayo clínico de fase 3 en curso. Entre esos participantes, 18.801 han recibido la vacuna y 18.785 han recibido un placebo. Se les ha seguido durante una media de 2 meses después de la vacunación.
El efecto secundario más común de la vacuna es la reacción en el lugar de la inyección. Estas reacciones pueden causar algo de dolor y otros síntomas alrededor del área donde se inyecta la vacuna.
A veces se siente algo de enrojecimiento, algo de calor, un poco de hinchazón leve o dureza alrededor del lugar de la inyección. Las reacciones en el lugar de la inyección fueron informadas por 84% de los participantes que recibieron la vacuna.
Otros efectos secundarios comúnmente reportados de la vacuna Pfizer-BioNTech COVID-19 incluyen fatiga, dolor de cabeza y dolor muscular.
La fatiga ha sido reportada aproximadamente por 63% de los sujetos de investigación que recibieron la vacuna, mientras que el dolor de cabeza y el dolor muscular han afectado a alrededor del 55 y 38% de los participantes, respectivamente. En la mayoría de los casos, esos síntomas han sido leves y se han resuelto en aproximadamente un día.
Un número menor de participantes informó escalofríos, dolor articular o fiebre después de la vacunación. Los participantes tenían más probabilidades de informar tales síntomas después de la segunda dosis de la vacuna.
La reacción a la segunda dosis tiende a ser un poco más intensa, lo que tiene lógica, ya que el sistema inmunológico ya ha sido expuesto, provocando una respuesta más rápida y sólida. Eso tiene mucho sentido inmunológicamente.
Los eventos adversos graves son raros
Entre los participantes que recibieron la vacuna y los que recibieron el placebo por igual, la tasa informada de eventos adversos graves es menor de 0,5%, sin diferencias significativas entre los dos grupos.
Se han informado 4 casos de parálisis de Bell en los participantes que recibieron la vacuna, mientras que no se ha informado ninguno en los que recibieron el placebo.
Sin embargo, esos cuatro casos son coincidentes con la tasa de parálisis de Bell en la población general. En otras palabras, no hay evidencia clara de que la parálisis de Bell fuera causada por la vacuna.
Las reacciones alérgicas graves a las vacunas son muy raras, pero pueden ocurrir. Las autoridades sanitarias recomiendan que las personas que hayan experimentado una reacción alérgica grave a una dosis anterior de la vacuna Pfizer-BioNTech COVID-19, o a cualquiera de sus ingredientes, no la reciban.
Sopesando los beneficios y los riesgos
Es importante reconocer que algunos efectos secundarios de la vacuna Pfizer-BioNTech COVID-19 son comunes y normales. Si experimentas efectos secundarios de leves a moderados después de la primera dosis, eso no significa que debas omitir la segunda dosis.
Tu inmunidad está incompleta después de una dosis y puede que no sea eficaz. Por lo tanto, es muy probable que hayas desperdiciado la primera dosis, si no recibes la segunda a tiempo. Si tienes preguntas o inquietudes sobre la vacuna, es importante que antes hables con tu médico. sobre los posibles beneficios de la vacuna, así como los posibles riesgos.
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