Una importante cantidad de investigación está encontrando un vínculo entre la vitamina D y COVID-19, lo que lleva a algunos expertos a creer que esto puede ser útil en la lucha contra el virus.
Concretamente un nuevo estudio que analizó a 216 personas con COVID-19 encontró que el 80% no tenía niveles adecuados de vitamina D en la sangre.
El estudio también encontró que las personas que tenían tanto COVID-19 como niveles más bajos de vitamina D también tenían una mayor cantidad de marcadores inflamatorios como ferritina y dímero D, que se han relacionado con peores pronósticos de COVID-19.
Otro estudio diferente encontró que los pacientes con COVID-19 que tenían niveles adecuados de vitamina D tenían un 51,5% menos de riesgo de morir a causa de la enfermedad y una reducción significativa del riesgo de complicaciones.
Los expertos médicos teorizan que mantener niveles adecuados de vitamina D puede ayudar a reducir el riesgo o ayudar a la recuperación del COVID-19 grave en algunas personas, aunque se necesitan más pruebas.
Investigación
En la investigación, los hombres tenían niveles más bajos de vitamina D en comparación con las mujeres.
Las personas con deficiencia de vitamina D tenían una mayor prevalencia de hipertensión y enfermedades cardiovasculares. También tuvieron estancias hospitalarias más prolongadas por COVID-19, mostró el estudio.
Las comorbilidades como la hipertensión, la diabetes y la obesidad están asociadas con un nivel bajo de vitamina D.
Recuperación de vitamina D y COVID-19
Sin embargo, además de la correlación entre los niveles de vitamina D y el riesgo de COVID-19 , muchas personas están analizando cómo puede proteger a las personas o ayudarlas a recuperarse de la enfermedad.
Un enfoque es identificar y tratar la deficiencia de vitamina D, especialmente en personas de alto riesgo como los ancianos, los pacientes con comorbilidades y los residentes de hogares de ancianos, que son la principal población objetivo del COVID-19.
El tratamiento con vitamina D debe recomendarse en pacientes con COVID-19 con niveles bajos de vitamina D circulando en la sangre, ya que este enfoque podría tener efectos beneficiosos tanto en el sistema musculoesquelético como en el inmunológico.
¿Deberías controlar tus niveles de vitamina D?
Los expertos que han investigado la vitamina D no recomiendan que todas las personas deban hacerse un examen.
Es razonable vigilar los niveles de vitamina D en las personas con síndrome de malabsorción de grasas, las personas con obesidad o las que tienen otros problemas médicos.
La Endocrine Society recomienda que los bebés ingieran entre 400 y 1000 UI al día, los niños entre 600 y 1000 UI al día y los adultos entre 600 y 2000 UI al día.
Los adultos con obesidad pueden necesitar de 2 a 3 veces más.
Si el nivel de vitamina D es bajo, la suplementación puede ser útil.
Hay varias publicaciones que han sugerido que la deficiencia de vitamina D está asociada con un mayor riesgo de infecciones del tracto respiratorio superior, incluida la influenza y el coronavirus.
Para las personas con COVID-19, no hay inconvenientes en aumentar la ingesta de vitamina D a menos que una persona tenga un trastorno poco común, como sarcoidosis y otros trastornos granulomatosos.
También es razonable que niños y adultos tomen una cantidad adecuada de vitamina D según lo recomendado por la Endocrine Society para ayudar a reducir el riesgo de contraer el virus, así como reducir la morbilidad y la mortalidad si es un niño o un adulto. desarrolla COVID-19.
Un nivel muy bajo de vitamina D tiene muchas consecuencias negativas y este podría ser el caso de COVID-19, pero eso no es lo mismo que decir que la suplementación de rutina con vitamina D evitará infecciones graves.
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